Más Sobre Congreso de Londres sobre Diseminación y Ayuda

Prácticamente el único acto overt que podríamos cometer ahora en Scientology es dejar de diseminarla adecuadamente.

Tu responsabilidad no se puede parar simplemente en saber para ti mismo, simplemente porque estabas relacionado con un mundo que no sabe. — L. Ronald Hubbard

Corría el verano de 1960, apenas un año después de que Ronald hubiera establecido Saint Hill como base de operaciones de toda la investigación y diseminación.

La tecnología ya había avanzado a pasos agigantados. Primero con los medios para el clearing a gran escala mediante la coauditación (Congreso de Theta Clear). Luego con el avance sensacional de la responsabilidad y su tecnología de overts y ocultaciones para impulsar cualquier caso y cualquier dinámica (Congreso del Estado del Hombre). Aún más, con estos avances sensacionales, ahora aplicándose por todo el mundo, la población de Scientology se había duplicado en sólo diez meses.

Sin embargo, lo que Ronald descubrió a continuación estaba a punto de marcar un crecimiento sin precedentes. Porque era, de hecho, la fórmula mágica de la diseminación.

Todo surgió del hecho de que, con la tecnología existente, ahora capaz de impulsar a cualquier caso directamente hasta Clear, la única barrera era meter al preclear en sesión para que pudiera aplicarse la tecnología. Pero como pronto anunciaría Ronald:

“¿Alguna vez te has preguntado cómo convencer a un extraño para que reciba auditación? ¿Alguna vez has tenido que 'venderle' Scientology a un miembro hostil de la familia antes de poder auditar a alguien? ¿Alguna vez has tenido problemas al auditar a alguien?

Bueno, te agradará saber que estos problemas han quedado desterrados gracias a unos materiales que acabo de desarrollar”.

Ese desarrollo era algo completamente nuevo: los procesos de presesión, llamados así porque se usaban para entrar en sesión:

“Si estos cuatro puntos no están presentes en una sesión, no es probable que se logren ganancias verdaderas y duraderas en un gran número de casos”.

Esos cuatro factores eran ayuda, control, comunicación e interés: botones tan poderosos que Ronald los llamó el “cuarteto mortal”. Más concretamente, dado que eran los factores necesarios para que pudiera tener lugar una sesión, también eran la clave para abrir la puerta de la diseminación. Porque como lo descubrió LRH, los mismos factores que le impedían a un ser estar interesado en su propio caso eran los que también le impedían tener interés en Scientology en sí. Y por eso él estaba entonces publicando ampliamente la tecnología, para que fuera usada por todos los scientologists:

“La razón de que en la actualidad la gente no muestre gran entusiasmo de inmediato cuando les mencionas que existe una ciencia nueva y sorprendente, es que esa gente, en su mayoría, están tres peldaños por debajo de ser capaces de tener interés”.

Y si bien Ronald enumeró entonces instrucciones paso a paso para aplicar el cuarteto mortal a la diseminación, literalmente “cómo hacerlo”, nada podía compararse con lo que proporcionó a continuación.

Se llamaron las Conferencias Vespertinas de Entrada Libre de Londres, puesto que estas eran conferencias para el público en que todos eran bienvenidos, sobre todo los no-scientologists. Había entre el público, pues, scientologists, amigos de estos y público que jamás había oído hablar del tema. Y así fue, en el Empire Rooms en Tottenham Court Road en Londres, donde Ronald dictó conferencias y demostró el uso de estos factores para revitalizar el interés de cualquiera en la vida. Específicamente, los factores de presesión no eran solamente un medio para meter a la gente “en sesión”, sino que podían usarse por sí solos para revitalizar la vida en sí. Y, sobre todo, el factor de la ayuda:

“Esto es tan fundamental que la razón de que la vida sea vida y de que la gente esté junta, y de que la hierba crezca y los árboles crezcan, y de que aparentemente caiga la lluvia y todo lo demás, es que eso ayuda a alguien”.

Luego, para los scientologists, Ronald convocó el Congreso de Londres sobre Diseminación y Ayuda en el Royal Commonwealth Society Hall de Londres. Celebrado el 7 de agosto, fue aquí que presentó el poder del presesionamiento tanto en la auditación como en la diseminación. Momento en que ya no podía pasar desapercibida para nadie la totalidad de la magnitud de esta tecnología para lograr la meta mayor de una nueva civilización:

“Pero totalmente aparte de la auditación, si enderezaras esos puntos en cada compañero, o si enderezaras esos puntos en cada grupo, no importa qué clase de grupo, familiar, empresarial, militar, no importa cuál, si simplemente enderezaras esas cosas, simplemente esos cuatro, actuaría prácticamente como un grupo Clear, independientemente del estado de beingness de la gente que lo compusiera, lo cual es muy notable”.

Aquí hay, pues, dos series de conferencias en una: la tecnología en sí y su uso completo en la diseminación. Es la tecnología que llega directamente hasta el corazón de la fuertemente enraizada apatía, y sin la cual la gente de la Tierra quizás nunca tome su primer paso hacia la libertad. Y es por esto por lo que este congreso es la clave para la verdadera ayuda planetaria.